En sueños he visto el futuro. Pensé que era necesario dejar testimonio de lo observado y para ello consideré realizar, con esta nota, un graffiti en una pared de cualquier calle, escribirla en la Wikipedia o en el blog, para que no pille a nadie de sorpresa. Al final opté por realizar las tres cosas.
Generación del doble rostro
Por fin, después de mucho tiempo de lucha, la humanidad dio el salto a la perfección. La mutación comenzó en algunos individuos que sintieron como crecían pequeñas protuberancias detrás de sus cabezas hasta que, con los años, aparecieron nuevas fisonomías en la parte opuesta del cráneo.
Índice (no se puede ocultar porque mi plan de WordPress no da para eso)
Los rasgos se formaron libremente en conexión directa con los sentidos y la memoria así que, sin la mediación del lóbulo frontal, salió a la superficie para formarse en la nuca un rostro sin filtros cognitivos, ni controles.
Algunos los dejan al descubierto, otros lo adornan con largos cabellos y exóticos peinados. Unos y otros lucen con orgullo el símbolo de la evolución. Son Los Elegidos y tienen dos caras.
Evolución
Como pasa en todo proceso evolutivo, hubo individuos que sufrieron la mutación, pero no dieron el salto a la perfección. Aun no se comprende el porqué de ese fracaso. Los especialistas del Ministerio Evolucionista (ME), explican que la no-transformación se debe a la consciente negación de su condición de mutante. No aceptaron su doble semblante y como falta del espíritu adecuado para poder lidiar con el cambio, no forman parte de los elegidos: «Individuos que no tienen lo que hay que tener» fue el titular de la rueda de prensa ofrecida por el ME.
Luego apareció el Ministerio del Rostro Perfecto para la Aceptación Social (el MRPAS) que elaboró un inequívoco y completo proyecto para transformar sus rostros deformes, en otros más serviciales. Se les dio el nombre de los Malformacionistas y existían dos categorías los Malformacionistas I, que forman la masa y los Malformacionistas II en donde están los especialistas del arte, la ciencia, tecnología, teología, en fin, de todos los campos del conocimiento.
También quedan unos pocos que tan solo tienen una cara. No fueron rechazados, porque con la evolución de igual forma vino la aceptación de todo, incluso de ellos, que fueron llamados, desde el cariño, los Simples.
Con esta evolución también llegaron profundos cambios sociales, sin clases ni marginados.

Estructura social
La evolución se impone y el grupo de los Elegidos demostró ser el mejor para ejercer el liderazgo, gracias al domino completo del cerebro humano. Sus dos rostros permitieron el control de los cuatro lóbulos cerebrales. Los Malformacionistas I son funcionarios que asisten a los líderes y al orden público. Los Malformacionistas II trabajan al servicio de los Elegidos, cercanos a ellos. Entre sus múltiples funciones están las de transcribir las estrategias que ellos les dictan, las que permiten formar consciencia de rebaño, informar de los resultados y comunicarles el quehacer de los ciudadanos. En cuanto a los Simples se les asignaron algunas labores menores conforme a sus capacidades, son cuidadores y realizan el mantenimiento en los hogares de los Malformacionistas. Además reciben ayudas del ME. Luego están los Simples II producto del llamado Incidente del 22.
Ayudas estatales
La Lista (LL) es el proyecto elaborado por el MRPAS. Ofrece cursos sobre el manejo y control de los rostros para los Malformacionistas I y II que deseen aspirar a salarios más altos y según los progresos del aspirante se puede optar al fondo de financiación para futura remodelación del rostro frontal y desarrollo del posterior.
El MRPAS también tiene un programa avanzado de cursos de integración para los los Simples que les permite acceder a las ayudas de ME y aspirar a nuevos trabajos como limpieza de calles, recolector de basura y muchos otros, además de un aumento de honorarios y reducción de horas laborales.
Cirugías
Estos tratamientos lo realizan los especialistas del MRPAS y son voluntarios, previas aprobaciones de los cursos, luego de completar todo el ciclo de formación y entrevistas. Se tramita a través de LL y pueden optar a ellos los Malformacionistas I y II. El coste es variable, se aconseja consultar ya que es individual. La financiación se gestiona a través de LL en donde el trámite está muy bien detallado: el aspirante debe comprar una planilla, pagar la totalidad de la enseñanza sobre control de rostros, asistir y aprobar las materias. También los rigurosos reconocimientos de los especialistas tienen un módico precio. Después de realizar estas gestiones y tras la aprobación del mismo, se obtiene la firma certificada y sellos correspondientes, cuyo valor es independiente del curso.
De esta manera y previa cancelación de las operaciones, el aspirante pasa a La Lista de Espera (LLE) para comenzar la transformación que se divide en tres especialidades, de acuerdo al grupo que pertenece el afortunado solicitante, pero en ambos casos la primera fase del tratamiento consiste en borrar el rostro frontal. Las protuberancias posteriores que existen no son modificadas ya que están vinculadas con el lóbulo occipital y temporal. En estos momentos la ciencia no es capaz de diseñar ese rostro, ya que es el que puede mirar, procesar recuerdos independientes, vincularlos a sensaciones desconocidas. Es el que refleja el sentir, sin filtros, del individuo.

Para Los Malformacionistas I se diseñó el semblante perfecto del rostro frontal: cejas muy bien delineadas, ojos avellanados, nariz y orejas pequeñas, pómulos sobresalientes, labios prominentes, maquillaje impecable con una sonrisa majestuosa, eterna.
La transformación de Los Malformacionistas II consiste en plasmar un rostro neutro, que inspira respeto.
Las orejas son grandes, narices prominentes, aguileña. Labios rectos, delgados, sin sonrisa. Ojos desorbitados, recubiertos con gafas de vidrios gruesos. Cejas con un leve toque de descuido y el maquillaje es natural, casi blanco.


El tratamiento para los Simples es menos ambicioso, tan solo les borran el rostro, luego dibujan una sonrisa, disminuyen nariz, orejas, ojos y en las cejas esculpen puntos para formar una línea recta. No hay maquillaje, se realiza un tratamiento para blanquear la piel.
Festejos nacionales
En la celebración del Día del Resurgimiento Humano no se esperan sorpresas. Las mejores filarmónicas afinan sus ensayos para acompañar los bailes de salón que amenizarán el monumental festín y todos se preparan para asistir. De acuerdo con lo establecido, los Elegidos llegan ante la aclamación popular, al sonar las trompetas. Los Malformacionistas I encargados de la recepción abren puertas, saludan con una leve inclinación de cabeza, sirven y atienden a los presentes.
La música embriaga a todos con sus exquisitas melodías. Algunos de los Elegidos danzan y conversan con sus caras frontales con unos y con las de la nuca con los que se encuentran detrás de ellos, pero en ambas conversaciones realizan acuerdos, cierran pactos, aunque cada rostro lo hace por separado y llegan a distintos convenios, a diferentes compromisos. Otros charlan por los salones, con la misma actitud de los que bailan. Esa noche memorable se forman y se destruyen alianzas sin que esto perturbe el ameno coloquio.
También están los que desde los balcones lanzan migajas a los Simples, que se aglomeran en las afueras del Palacete. En el año 3022 se dio el escandaloso caso de un Simple que cruzó el límite, el incidente pasó a la historia como El incidente del 22 y fue el que dio origen a los Simples II.

El incidente del 22
En las fiestas de la celebración del Día del Resurgimiento Humano del año 3022 tuvo lugar un hecho que luego será conocido como el El incidente del 22 y que originó una nueva forma del rostro humano.
Los acontecimientos
Tras la línea de restricción los Simples recogen ansioso restos de alimentos del suelo que, desde los balcones, son arrojados por los Elegidos a su pueblo. Todo transcurre según la tradición hasta que un Simple se acerca demasiado a unos de los ventanales y observa una apetitosa bandeja repleta de piezas de carne. Un Malformacionistas I la lleva en sus manos y la ofrece a los invitados sin percatarse de que es observado. El Simple sigue la bandeja con la mirada y sus pies acompañan a esa mirada con pequeños movimientos que se transforman en sigilosos pasos que lo hacen subir unos peldaños de la imponente escalera y lo llevan fuera del límite permitido. De inmediato es apresado por un par de Malformacionistas I, encargados del orden. Se disponen a expulsar al intruso, pero escuchan el mandato del Elegido quien detiene la acción y pide la presencia de Los Malformacionistas II, los especialistas, que acuden al instante.
El suceso llama la atención y los Elegidos se aglomeran curiosos a la puerta del Palacete, en las escalinatas, se asoman por los balcones. Aquel que habló primero, pregunta al Simple con voz imperativa —¿Quieres estar entre nosotros? —Éste tiembla de miedo, se queda en silencio, con la cabeza gacha.
Cansado de esperar respuesta el Elegido hace un gesto y da la orden para que se le aplique, en ese mismo momento, la transformación de su rostro frontal. Tas un breve mutis y de forma unánime el resto de Elegidos aplauden la medida. Los especialistas, diligentes, lo acuestan en el suelo y entre gritos de terror su fisonomía es borrada. Los otros Simples tratan de correr, pero les ordenan permanecer en silencio y observar lo que allí acontece. Todos presencian a los Malformacionistas II, los especialistas, iniciar la talla sobre la piel de la nueva imagen.
Debido el exceso de alcohol y la euforia del momento, no logran dibujar una sonrisa, queda una extraña mueca. La nariz, orejas y ojos están tan pequeños que casi desaparecen, tampoco alcanzan esculpir los puntos de las cejas. Al terminar esperan con temor la opinión de los Elegidos, pero escuchan con sorpresa aclamaciones y aplausos por inventar una nueva categoría de humano. Decidieron llamarlos Simples II. Entre vítores dan por terminada su labor y se retiran al interior del Palacete para continuar en el festín.

Por orden de los Elegidos el primer Simple II es introducido también al Palacete. Allí el encargado, Malformacionista I, le expone sus nuevas funciones y la situación que debe afrontar. Le entrega un documento que detalla los gastos de la transformación que acaba de ocurrir, le pide la lea y firme su conformidad al pie del papel, pero los diminutos ojos, el dolor, la sangre que aun corre por su maltrecho rostro se lo impide y ante la premura del Malformacionista I, como puede, estampa a manera de firma, un garabato. El Malformacionista I explica que el costo de ese tratamiento lo pagará con el trabajo que acaba de obtener.
—Es sencillo, solo debes limpiar el Palacete. No puedes dejar que la pereza se apodere de ti, los Elegidos son muy exigentes. —Ante la no respuesta del Simple II le dice —¿No te das cuenta que tienes mucha suerte? Eres el primer Simple que trabaja aquí, cerca de los Elegidos. ¡Qué afortunada es tu vida! Lo logras sin realizar ningún curso, sin anotar tu nombre en la LL ni en la LLE —y sin más palabras se retira.
El Simple II, entre dolores insoportables y espasmos no puede mantener su cuerpo en posición alguna, así que, tumbado en el suelo espera a que la fiesta termine. Llega el momento, un Malformacionista I le entrega dos cubos muy grandes, una bolsa gigantesca, detergente y un paño. Lo lleva a las escalinatas de la entrada del Palacete para indicar en dónde puede buscar agua y le ordena que debe limpiar el suelo.
—Para ello utiliza uno de los cubos, con esa agua y detergente. El otro cubo es para introducir los restos de comida, la basura restante la metes en la bolsa. No te equivoques porque los alimentos son para repartirlos, el mes entrante, como ayuda social a los Simples. Comienza a limpiar la sangre seca, da mal aspecto.
En la soledad de su desespero, no le queda más remedio que comenzar su trabajo. La cabeza casi a ras al suelo para poder distinguir lo que sus diminutos ojos no le permiten observar, limpia con el paño que tiene entre sus temblorosas manos. Sin olfato no siente los vapores ácidos de los productos de limpieza hasta que alcanzan la maltratada piel del rostro recién adquirido y lo obligan a despegar la cara del suelo. Al recoger los desperdicios para colocarlos en las bolsas, siente la tentación de comer alguno de los alimentos que al tacto parecen en perfecto estado, pero no lo hace por temor a recibir otras represalias. Continúa con la limpieza del suelo en silencio. Sin apenas escuchar lo que pasa a su alrededor desata su furia con fuertes movimientos del trapo. Los Malformacionistas II observan la escena. Se sienten satisfechos por la dócil y servil actitud del nuevo empleado. Se dirigen a sus oficinas para redactar un boletín:
El Ministerio del Rostro Perfecto para la Aceptación Social (MRPAS) junto al Ministerio Evolucionista (ME) informan:
Se abren nuevos empleos y una diferente fase para los Simples. Ahora pueden aspirar trabajar en el Palacete, cerca de Los Elegidos. Si deseas ese cargo debes solicitar la planilla para Simples II. El coste del mismo, así como el tratamiento correspondiente, se detallará en un próximo boletín.
A la mañana siguiente en las calles, cafés, bares, restaurantes, trabajos, todos hablan de la espléndida fiesta del Día del Resurgimiento Humano. La mayoría está recelosa porque los Simples lograron, sin saber, un escalafón social por encima de sus capacidades. Piensan que no son aptos para trabajar cerca de los Elegidos, sin embargo guardan silencio y muestran sus rostros complacientes mientras halaban la novedad. Algunos de los Simples, al recordar los alimentos del festín, se sienten tentados a solicitar su transformación. Otros quieren huir de la ciudad, pero la vigilancia extrema se lo impide.
Véase también
Referencias
Lóbulos cerebrales Consultado en julio 20, 2022
¿Quién relata esto? Información publica
Enlaces externos
Una semana para celebrar escribiendo en el #AsiloOscuro Versión micro relato de la misma historia
Hola, Rosa. Tremenda pintura de injusticias sociales. Imposible no hacer paralelismos. Muy bueno
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Hola mireugen. Me alegra que te haya gustado. Gracias por el comentario. Un abrazo 🐾
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Buenos días, Rosa.
Qué impresionante y maravillosa imaginación tienes.
Lo del doble rostro es conocido en la realidad, sobre todo por políticos y gobernantes, pero no en la fantástica forma en que la has ideado y escrito tú.
¡Qué bueno! 👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼
La verdad es que el mensaje que mandas con tu relato, más allá de la fantasía, está claro y no creo que cambie con el tiempo: Cualquier diferencia, anomalía, mutación, descubrimiento que se consiga y del que puedan sacar provecho los de arriba, crearán, confirmarán o agrandarán las clases sociales. Incluso, como en tu relato, subdividiendo las ya existentes para diversificar todavía más la vida.
Con respecto a la mutación, esa doble cara resulta, al menos inicialmente, inquietante. Te puede servir para mirar tanto hacia delante como hacia atrás, pero como dijo alguien: cuántos más ojos, más cosas desagradables para ver. 😝
Felicidades por esta magnífica historia.
Un abrazo. 🤗😊👍🏼
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Hola JascNet. Tienes razón, de existir en el futuro alguna mutación, los ignorados de la sociedad vamos a seguir subdividiéndonos en aras de la «emancipación de los géneros/profesiones/trabajos/etc./etc.». Gracias por tus palabras, me alegraste la mañana (ayer estaba trabajando y no lo vi 😲) Me alegra mucho que te haya gustado este historia futurista 😁. Un abrazo 🐾
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¡Qué inquietante, Rosa!
Tu imaginación y los detalles con que recreas estas historia son impresionantes. Como crítica social es poderosa y directa. Como distopía futurible, menos mal que no llegaremos a ese 3022.
Un fuerte abrazo 🙂
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Hola Miguel. Yo aspiro a que eso no ocurra, aunque lo veo factible. Gracias por tus palabras, se te extrañaba. Un fuerte abrazo 🐾
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Wow vaya relato!! Sobre todo inquietante.
Aunque bien pensado, creo que todo, al final, se repite y se repite…
Abrazo grande
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Hola amaialarrea. Todo cambia para que todo siga igual. Muchas gracias por tu comentario. Un abrazo 🐾
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