«Vivo nervioso» pensó mientras intentó trabajar y escuchar su música, en el cubículo que comparte con Anier.
🔉… Perdona por no hablar de lo nuestro♫ cuando tuve que hablar…♪♪
A Saturnino Segundo le atormenta no encontrar a Bram de regreso. Teme lo que le pudiera pasar. En la casa de sus padres, la alegría de verse no se puede manifestar. Su nexo es censurado a diario. A Saturnino Segundo lo saludan con una enumeración de quejas sobre la conducta de su «amigo» (que suman a las que no pudieron decirle la noche anterior)
Por fortuna, su inseparable amigo suele esperar un tiempo a que lo busque con la mirada por toda la estancia antes de salir a su encuentro desde algún rincón. Era un juego que se habían inventado desde el comienzo de la relación.
«Bram vive nervioso» pensó mientras persiste en el intento de trabajar y escuchar su música.
🔉… ♫♪ Perdona por no haberme separado ♪♪ De mis amigos y amigas ♫♪
Toca decidir
Señales significativas. Precaución total. Saturnino no confía. No habla con ninguno de los dos…
Las barajas también pronostican conversaciones… ¿probamos hablar?
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Rosa Boschetti 